¿Qué es un diamante creado en laboratorio?
Un diamante de laboratorio es un diamante al 100%, exactamente igual que uno natural. Al igual que una flor creada en invernadero, es idéntica a la que podemos ver en la naturaleza. El diamante natural está creado por átomos de carbono que, durante millones de años y en condiciones precisas de temperatura y presión, la Tierra transforma en diamante. Hoy en día, con la tecnología actual, se ha conseguido recrear en laboratorio esas mismas condiciones de temperatura y presión para poder transformar esos mismos átomos de carbono en diamantes, al igual que lo hace la naturaleza.
¿Por qué comprar un diamante creado en laboratorio?
El diamante de laboratorio es exactamente la misma piedra preciosa que el diamante natural. Tienen la misma composición, las mismas características de color, dureza, pureza y talla ,etc. que el diamante natural. La misma certificación del I.G I. (instituto gemológico internacional ).
No se diferencian en nada. Incluso los gemólogos más experimentados son incapaces de diferenciar entre los dos a simple vista.
Entonces, ¿por qué comprar un diamante de laboratorio?
En primer lugar, por el precio. Los diamantes de laboratorio son sustancialmente más económicos que los naturales.
En segundo lugar, por ser mas ecológicos .
Un diamante de laboratorio no daña al medio ambiente, como lo hace la búsqueda de los diamantes naturales.
Un diamante natural necesita la extracción de miles de toneladas
de tierra en la mina y en muchas ocasiones en condiciones laborables denigrantes, para obtener unos pocos diamantes. Por
otro lado, el diamante creado en laboratorio se obtiene en laboratorios controlados, con todas las garantías medioambientales y por personal altamente cualificado para el proceso.
En definitiva, merece la pena invertir en diamantes creados en laboratorio, tanto por su economía como por el bien del planeta.
CARACTERÍSTICAS DE UN DIAMANTE
¿Cuáles son las principales características de un diamante?
Las características fundamentales que debemos fijarnos a la hora de adquirir un diamante son las siguientes:
- Peso: El peso del diamante se refiere a su tamaño. Viene
expresado en quilates (ct) (1ct = 0,20 gramos) y es, probablemente, el factor más determinante para estimar su precio (ver tabla). - Pureza: En el proceso de creación de un diamante surgen pequeñas inclusiones que determinan su pureza. Cuanto más puro es un diamante, más se cotiza (ver tabla)
- Color: El color de un diamante influye notablemente en su belleza y en el precio de este. (ver tabla).
- Talla: La talla influye en el precio por dos motivos:
El tipo de talla y la calidad de la talla.
Aunque existen muchas tallas posibles, la talla brillante es la más común. Otro tipo de tallas serian la ovalada, esmeralda, pera o cojín (ver tabla).
